EN LAS FAUCES DEL TIGRE.

LUNES 06/5/13 :::::::::::::: EN LAS FAUCES DEL TIGRE

Tu cabeza ya se encuentra dentro de las fauces del tigre no hay escapatoria; por eso deja que el proceso se tome todas las reencarnaciones que la fuente quiera. - Ramesh Balsekar Hay dolores que no cesan, enfermedades que no desaparecen, culpas y miedos que pesan, enormes cargas o cruces a cuestas, oraciones que parecen no ser escuchadas por ningún Dios, millones de preguntas sin respuesta; tantas que flotan en el ambiente y puedo escucharlas... ¿Por qué a mí? ¿Por qué yo? ¿Por qué? ¿Qué pasa? Y a mí todo esto me lleva inevitablemente a aceptar que los humanos nacemos endeudados con los demás seres que tenemos instalados en el recuerdo y que esa deuda tiene su pago en el tiempo, que la única forma posible de pagar es con amor, prestando un servicio en este mundo en la mejor forma posible. El párrafo anterior también quiere decir, que si naces, ya te encuentras dentro de las fauces del tigre, es decir, envuelta en el ayer, en un pasado que se aferra a sobrevivir a costa de tu felicidad, envuelta en un pasado que llega a través de tus pensamientos y que es representado por personas, por situaciones y también por cosas. Y si ya te encuentras dentro de las fauces del tigre, no tienes para donde correr, excepto una solución bastante drástica para la mente y que es: HABITAR EL AHORA, sentir que estás viva, sentir que existes. Sin embargo esto no siempre es posible porque los pensamientos quieren salir de dónde están para ser limpiados y luchan por un lugar en tu presente, luchan desesperadamente por tu atención, quieren estar ahí contigo. Es por esto que se te sugiere que limpies con un TE AMO cada segundo de tu existencia, ya que esto te permite aceptar tu experiencia. Entonces has de permitir que los procesos que más te duelen se tomen el tiempo o como dice la frase inicial, las reencarnaciones que la fuente -Divinidad- quiera. Es decir, la Divinidad manda y tú aceptas. Si haces esto último, si le dices a tus dolores que pueden quedarse, si permites que lo que es sea, sin tiempos, sin fechas, milagrosamente descansarás, te sentirás mejor, fluirás con el proceso de la vida, serás una con la Divinidad. Estás dentro de la boca del tigre. No te resistas a lo que hay en ella. No intentes cambiar lo que es, lo que sucede, lo que sientes. Santifica eso que te está sucediendo. Para facilitarlo, a lo largo del día puedes decir mentalmente o en voz alta: Que se haga tu voluntad y no la mía. Amo y acepto la forma en que me siento. Gracias.